Reportaje Chevrolet Camaro 2012 (08 Dic 2012)

PhotoShoot Chevy Camaro 2012

Esta semana nos desplazamos hasta El Señorío de Rías, un complejo forestal situado en pleno parque natural de la Sierra de Huetor para fotografíar uno de los Muscle Car más bonitos de todos los tiempos.

Además del Chevy Camaro, en este photoshoot hemos podido contar con la presencia de uno de sus eternos rivales de ventas, el Ford Mustang. Poder reunir a estos dos monstruos del asfalto es todo un lujo y algo bastante difícil en nuestro país.

Y por si fuera poco, tanto el Camaro como el Mustang son de color blanco con franjas longitudinales, lo que nos da la oportunidad de hacer una comparación estética bastante real y decidir cual de los dos nos gusta más… Tu cual prefieres?

Desde su aparición en 1967, el Chevrolet Camaro ha sido el sueño de millones de aficionados a los Muscle Cars, y es, junto con el Ford Mustang y el Dodge Charger, uno de los coches americanos más emblemáticos de todos los tiempos.

A lo largo de la historia de este vehículo, cada nueva generación que se ha comercializado ha ido ganando en modernidad, perdiendo las musculosas formas que caracterizaron la primera versión en pro de unas líneas cada vez más afiladas y deportivas.

Pero en 2010 todo esto cambió, y gracias a la tendencia iniciada por Ford con el Mustang de 2005, Chevrolet puso todo su buen hacer sobre la mesa de diseño y relanzó el Camaro, y tal y como hicieron sus competidores, volvió a sus orígenes e hizo un perfecto remake del modelo del ’67.

Regresó la cintura alta, las formas musculosas y una linea contundente, volviendo a hacer un coche con aspecto agresivo, fuerte, cargado de hormonas masculinas, que devolvieron al Camaro su personalidad inicial, dejando las líneas deportivas a su hermano mayor, el Corvette.

Pero aunque la estética haya retrocedido en el tiempo, la tecnología de última generación y el lujo estan muy presentes en el coche, que equipa elementos tan actuales como luces diurnas y pilotos traseros de LEDs, Bluetooth, toma para iPod o faros de Xenon de alta intensidad.

En cuanto a la seguridad, la dotación de serie es bantante completa, incluyendo elementos con los que un Muscle Car ni hubiera soñado hace años, como Airbags frontales y laterales para impacto de tórax y cabeza, Control Electrónico de la Trayectoria (ESC), Frenos ABS con EBD, anclajes ISOFIX para asientos infantiles o su carrocería en acero ultra resistente para mantener a los ocupantes a salvo en caso de fuerte colisión.

Otros extras que podemos encontrar en el Camaro son el sistema de arranque a distancia, cambio automático con convertidor de par, sensores de aparcamiento con cámara de visión trasera, iluminación interior en azul, asientos de piel, techo solar, llantas de aluminio pulido de 20 pulgadas o el pack Transformers.

En cuanto a mecánica, la marca de Detroit no ha escatimado y como es tradición en este tipo de vehículos, el Camaro está dotado de un un auténtico motor V8, en concreto el bloque LS3 de aluminio heredado ni más ni menos que del Corvette C6.

En cifras, el propulsor es un 6.162 cc que cuenta con un sistema de alimentación por inyección secuencial (SFI), rinde 432 CV@5900 rpm, arroja una cifra de par de 569 Nm@4600 rpm, y homologa un consumo combinado de 14,1 l/100km. Eso sí, tenemos la ventaja de poder desconectar cuatro cilindros para ahorrar consumos.

Como debe ser en todo deportivo que se precie, el Camaro es tracción trasera, y tiene una aceleración 0 – 100 km/h de tan sólo 5,2 segundos, que por experiencia propia os digo que te deja literalmente pegado al respaldo de sus enormes asientos deportivos.

Pero como todo esto son datos y cifras, entremos en materia y hablemos de «cómo anda» el bicho… Con el motor a ralentí, parece que nos han engañado y que bajo el capó hay un pequeño motor de gasolina de cuatro cilindros, no suena apenas!!

Cuando iniciamos la marcha, y mientras circulemos a bajas rpm, todo es suavidad, pero cuando ahondamos el pié en el acelerador, el morro se levanta y un bronco sonido proveniente del V8 invade el habitáculo a la vez que experimentamos un empuje bestial que te achucha contra el asiento.

Es una sensación que por muchos adjetivos que se escribamos siempre nos quedaremos cortos, el empuje de un V8 americano es una de las cosas que todo aficionado al motor debería vivir en su propia piel al menos una vez en la vida… lo malo es que cuando lo pruebas, engancha, y mucho.

Y seguro que ya os estareis preguntando qué hay que hacer para tener uno de estos en vuestra cochera. Como sabreis, hasta hace realmente poco tiempo la única forma de tener un deportivo americano en nuestro país era importándolo, con el consiguiente coñazo de homologaciones, trámites y papeleos.

Pero afortunadamente Chevrolet ha decidido venderlo de forma oficial en España, y, aunque el precio es bastante alto comparado con el que tiene en Estados Unidos, los casi 45.000 € que cuesta aquí la versión 2012 del Camaro no son nada comparado con todo lo que ofrece.

Para poder homologar este coche y que cumpla con los requisitos de la Unión Europea se han tenido que modificar algunos elementos como el capó, el volante o la luz de posición. Pero donde más se pueden apreciar cambios con respecto a la versión USA es en los espejos retrovisores, más grandes, de forma más cuadrada y que incluyen repetidor de intermitencia.

Impactante diseño, aceleraciones fulgurantes, derroche de par motor, y todo eso aderezado con un sonido genuinamente V8 que aparece cuando pisamos a fondo el acelerador… Por algo es el protagonista de la exitosa saga cinematográfica Transformers.